Muchas veces nos cuesta dimensionar la organización que implica una mudanza. Es habitual empezar a embalar y una vez todo listo, pensar en qué trasladar todo. Confiamos en que nuestro automóvil o el de un amigo será suficiente para trasladar todo lo que tenemos en unos pocos viajes. Quizás en algunos casos sea así, pero en otros será conveniente contratar un servicio de flete. Si pensabas que la única opción era en camión enorme de las películas, te contamos que hay muchas opciones entre las que podés variar de acuerdo a tus necesidades.
Es la opción más pequeña, ligeramente más cabedora que un automóvil familiar. Es útil para cargas generales de pequeños bultos como valijas, cajas embaladas, pequeños muebles y mascotas. Aquí no podrás trasladar un gran guardarropas o la heladera, por ejemplo. Tiene capacidad de un pallet de hasta 400kg y con espacio de unos 3m3. Como en este vehículo no se pueden transportar grandes bultos, es ideal para realizar mudanzas entre departamentos amueblados.
La opción más fácil y simple de conseguir es la camioneta. Al no tener techo hay menos limitaciones en cuanto a la altura, sin requerir un transporte de gran tamaño. De todos modos no debe ser sobrecargado ya que no tiene una gran superficie. Puede trasladar lo mismo que el vehículo anterior más algunos elementos con mayor volumen, como sillones o alguna mesa. Es de gran ayuda cubrir los elementos por encima con algún material protector, para evitar que se ensucien o dañen. Sin embargo, no será suficiente protección en caso de lluvias fuertes.
Este transporte ofrece mayor capacidad que el primero y una mejor protección que el segundo. Tiene una capacidad de carga de hasta 2000kg y entre 5 y 8m3 de espacio. Es ideal para trasladar además de objetos pequeños, una cama con su colchón, mesas con sillas y algunos electrodomésticos pequeños como microondas y televisor. Como medida general, te servirá guiarte en el hecho de que esta opción es la indicada para trasladar el contenido de dos ambientes domésticos, por ejemplo, una habitación y un comedor pequeño.
Si el volumen a mudar es mayor a todo lo mencionado porque tenés que trasladar también sillones, lavarropas, heladera, el camión mediano es el conveniente. Su capacidad de carga de hasta 3500 kg y es la medida adecuada cuando se trata de una mudanza de tres a cuatro habitaciones pequeñas.
Finalmente, el transporte más grande para cuando el volumen de carga supera a las opciones anteriores. Ya sea porque se trata de una familia con muchos objetos o de una casa de tres ambientes grandes o más. Su capacidad es de hasta 7000 kg, así que no tendrás problemas con los muebles grandes y pesados, entrará todo lo necesario y en un solo viaje.
Ahora que tenés más claro el panorama, podés hacer una lista de todos los muebles que tenés que trasladar y estimar la cantidad de valijas y bultos pequeños, en base a la cantidad de habitaciones. Esto te permitirá contratar el tamaño de flete adecuado y no dudes en consultar a tu proveedor sobre tus necesidades.
Además, deberás tener en cuenta la ayuda que necesitarás. Cuando hablamos de un servicio de flete, en general estamos contratando únicamente el traslado con el compromiso de la entrega de los objetos, en tanto que el servicio de mudanza incluye el personal necesario para carga y descarga. Este suele ser un servicio más costoso pero te resolverá prácticamente toda la tarea. Prevenir todos estos detalles te permitirán estar más tranquilo a la hora de la mudanza y evitar estrés por tiempo y gastos extras, ya que tendrás todo bajo control.